El Reino Unido activó el mayor nivel de alarma terrorista luego de que las fuerzas de seguridad impidieran ataques contra 10 vuelos con destino a Estados Unidos.
Scotland Yard confirmó que hay 21 detenidos. Señalan que el plan tiene la marca de Al Qaeda. Se reforzó la seguridad en todos los aeropuertos.
Al menos 21 personas fueron detenidas hoy por la policía británica en relación con un supuesto plan para hacer estallar aviones de pasajeros en vuelo entre el Reino Unido y Estados Unidos, informaron las autoridades británicas.
El aeropuerto londinense de Heathrow, el de mayor movimiento de Europa, fue cerrado a la mayoría de los vuelos europeos luego de que las autoridades elevaron al máximo el estado de alerta, en un indicio de la probable inminencia de un atentado.
Las 21 personas -cuyas identidades no fueron reveladas- fueron detenidas durante la noche en Londres, sus alrededores y la ciudad de Birmingham, como parte de un gran operativo que duró varios meses, dijo el vice jefe de la policía británica, Paul Stephenson.
«Creemos que este esa un plan extraordinariamente serio y estamos seguros de que evitamos un intento de asesinato masivo a una escala inimaginable», dijo Stephenson, segundo de Scotland Yard, la policía metropolitana británica.
El funcionario policial no quiso decir cuántos aviones ni qué aeropuertos estaban en la mira ni si algún grupo en particular planeaba los ataques. Tampoco informó si las personas apresadas eran británicas o extranjeras.
La Casa Blanca respondió al anuncio con una elevación al máximo de su nivel de alerta para vuelos comerciales procedentes del Reino Unido, en medio de temores de que el plan no haya sido frustrado del todo.
Fuentes de la inteligencia estadounidense, citadas por la cadena CNN, dijeron que hasta 50 personas podrían estar involucradas en el plan, y que éste tenía «la marca de Al Qaeda«, la organización fundamentalista islámica de Osama Ben Laden.
El primer ministro británico, Tony Blair, de vacaciones en el Caribe, informó al presidente estadounidense, George W. Bush, sobre la situación, aseguraron esta mañana en el 10 de Downing Street, el despacho del premier británico.
Las principales aerolíneas internacionales suspendieron la partida y llegada de sus aviones a Heathrow y se verán afectados decenas de miles de pasajeros que no podrán llevar equipaje de mano en los vuelos, según las autoridades aeroportuarias.
Los pasajeros sólo podrán llevar encima «objetos absolutamente necesarios medicamentos vitales, así como pasaportes y billete de vuelo enfundados en plástico transparente«, advirtieron voceros de Heathrow.