«La luz del ritmo«, una nueva gema en la discografía del grupo de Flavio y Vicentico, llegó a las bateas. En octubre iniciaron el Satánico Pop Tour en el Foro Sol de la Ciudad de México. En la Argentina, la gira comienza el 6 de diciembre en el Estadio Chateau Carreras de Córdoba. Luego estarán en River Plate, el 12 y 13.

Foto Nora Lezano

Con el nuevo y esperado disco de Los Fabulosos Cadillacs, «La luz del ritmo«, reluciendo flameante en las bateas de América latina, el grupo del cantante Gabriel Fernández Capello («Vicentico»), el bajista Flavio Cianciarulo y el saxofonista Sergio Rotman, iniciaron la primera etapa del Satánico Pop Tour, su gira continental, en el Foro Sol del distrito federal mexicano.

La formación actual incluye además al tecladista fundador Mario Siperman, el baterista Fernando Ricciadi y el trompetista Dani Lozano, a dos invitados permanentes: el trompetista Hugo Lobo y el guitarrista Matías Brunel.
El disco incluye temas nuevos, reversiones y dos covers:  «Should I Stay Or Should I Go»,  de The Clash, y  «Wake Up», de Ian Dury. El disco sale en dos versiones: una sólo con el audio y otra que incluye un DVD, con un documental sobre la grabación de una hora de duración, realizado por Vito Rivelli, responsable del excelente sitio. http://www.lfcrarezas.com.ar/
A fines de marzo, mientras se ajustaban los engranajes para el regreso más esperado de 2008, una terrible noticia sacudió el seno de Los Fabulosos Cadillacs. Gerardo «Toto» Rotblat, percusionista del grupo desde principios de los 90, falleció repentina e inesperadamente luego de un show de Dancing Mood, uno de los tantos grupos donde batía sus tambores (también tocó con Mimi Maura y dirigía su propio proyecto, la Orquesta Jabalí).
La tarde-noche del primero de julio, los Cadillacs ofrecieron un concierto sorpresa, gratuito y por ende multitudinario, en uno de los costados del Planetario Galileo Galilei de Buenos Aires. Frente a unas diez mil personas, los Cadillacs repasaron viejos éxitos, reversionados, y presentaron un tema nuevo: «La luz del ritmo». Vicentico dedicó ese concierto, «y todos los que hagamos de aquí en más», a Rotblat.