Será una reunión convocada de urgencia para que productores de todo el país analicen la situación del sector.  Luego de una relativa calma mediática en torno a la situación de los productores lácteos del país, solapada por las venideras elecciones y las hipotéticas relaciones entre el campo y las candidaturas, los productores lecheros siguen intentando hacerse escuchar.

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Daniel Oggero, presidente de la Filial de Federación Agraria Argentina (FAA), Castellanos Oeste y consejero lechero de FAA en el Concejo Federal Santafesino, confirmó la convocatoria a una asamblea nacional. La misma se realizará el próximo martes 28 de abril, en la localidad de Suardi a las 17.30 en la sede del Club Sportivo.

De acuerdo confirmó el dirigente, esta resolución se adopta tras el pedido de convocatoria urgente presentado en la última reunión que mantuvo el Consejo provincial en Rosario, por el sector tambero. Sin embargo, urge a los convocantes insistir en que esta es una asamblea, mas no es un acto multitudinario de oradores, tal como a los que se está acostumbrando en los últimos magros tiempos.
A esta convocatoria, remarca Oggero, «es imprescindible que asista el tambero, porque lo que se quiere escuchar es su voz». Al tiempo que considera que «en base de lo que salga de ahí veremos qué medidas se van a tomar«. Y confirma que estará presente la Mesa Provincial de Enlace, mientras que el coordinador de dicho encuentro será el dirigente nacional de FAA, Eduardo Buzzi.
Esta asamblea de carácter nacional, contará con la asistencia ya confirmada de tamberos de las provincias de Córdoba, Entre Ríos y el sur santafesino. Con el objeto de que «asista todo el sector tambero del país» ya que, entiende Oggero, «la situación del sector lechero se hace insostenible; ya se está trabajando a pérdida«, asegura.

Nunca llegó

Según describe el representante de FAA en la región, «en líneas generales, el productor lechero, depende de la dimensión de su explotación, pero está perdiendo entre 0.15 y 0.20 centavos por día por litro que produce. Esto es insostenible«.
Respecto a las medidas adoptadas por el Gobierno nacional cuando las protestas del sector se generalizaron, Oggero confirma que «el precio por litro de leche nunca llegó«. Sin por el contrario, evalúa que fueron anuncios paliativos para relativizar los reclamos ante la comunidad. «Con eso lo único que han hecho es confundir a la opinión pública«, sostuvo.
No sólo niega los planes de la administración nacional para con el sector, sino que también explica que «los 0.10 centavos que teóricamente están llegando no alcanzan, porque estamos cobrando un precio de fábrica de entre 0.70 y 0.72 centavos, sumando los 0.10 centavos del Estado, estamos en 0.82 cuando existe un costo mínimo de entre 0.95 y 0.97 centavos por litro de leche«.
Oggero considera que el Gobierno nacional ha tergiversado esta modalidad de subsidio «porque en principio era -para los primeros- 3 mil litros de producción, pero después en la letra chica fueron ´hasta´ 3 mil. Entonces el productor que hace 3.001 no lo cobra. Antes, la idea era que si producía 3.500 ó 4 mil litros diarios, que cobre los primeros 3 mil. Pero luego lo han modificado a gusto y piaccere, como siempre«.

Aunar criterios

De acuerdo confirman desde la entidad convocante, el objeto de esta asamblea no sólo es hacer pública esta situación descripta, sino más importante aún «es aunar criterios y lograr consensos». Será a partir de ello que entonces la asamblea evaluará si se tomarán medidas, cuáles y cómo en todo caso. «No sé si medidas de fuerza, o alguna reunión con algún dirigente nacional, o con empresarios. La verdad que no se sabe cuál va a ser la medida porque en una asamblea decide la mayoría. Por eso le dimos el carácter asambleario«.
Concluyendo una de las perspectivas que más resuenan entre los productores tamberos, es la producción a pérdida desde hace poco más de un año, desde que comenzó el conflicto agropecuario. «Ya no se soporta más» es lo que la generalidad de los tamberos braman cada día.
Oggero explica asimismo, que «hubo un par de meses en los cuales se cobraron 0.93 centavos más los 0.10 que mandaba el Gobierno, esto fue durante unos tres o cuatro meses de mediados del año pasado. Meses en los que estuvimos trabajando con algún margen mínimo, pero el resto del año el trabajo fue a pérdida«.
Otro factor que no debe olvidarse en la evaluación general del estado de situación que padece el productor lechero -y al que pueden sumarse el resto de las producciones agropecuarias- es el factor sequía. Para este flagelo no hubo más medida, al parecer del resentimiento del trabajo rural, que la declaración de Emergencia Agropecuaria. «Que lo único que hace es prorrogar por un año las obligaciones inmobiliarias y ganancias, a una tasa de interés que fija el Gobierno, pero que tampoco es barata, está en un 14 por ciento anual«, concluye Oggero.