Tras participar de las protestas en Buenos Aires, Fernando Córdoba cargó contra la presión impositiva sobre la cadena láctea. También anticipó que se baraja otra manifestación en Plaza de Mayo.

Productores y dirigentes tamberos se manifestaron el pasado jueves frente a dos plantas de La Serenísima en provincia de Buenos Aires (Trenque Lauquen y General Rodríguez), además de enviar vacas a Liniers con leyendas en el lomo advirtiendo sobre la crisis en el sector, con el objetivo de llamar la atención del gobierno nacional y las industrias, que se niega a incluir en las mesas de negociación la formalización del mercado y el precio que recibe el tambero.

Fernando Córdoba, presidente de MeProLSaFe (Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe), participó de las protestas y anticipó a LT9 que la dirigencia analiza una nueva manifestación, que tendría lugar en Plaza de Mayo.

“Estamos en una situación complicada”, indicó, y relató que en la manifestación “surgió la idea de ir a la Plaza de Mayo, para visibilizar el problema, porque si no ocurre en Buenos Aires es como que no existiera el problema, lamentablemente”. Al respecto, recordó que los santafesinos protestaron hace unos años sobre en la Ruta 34, en Rafaela, “pero las soluciones no aparecen”.

Córdoba también cargó las tintas sobre la presión impositiva sobre la lechería y criticó duramente al gobierno por no dar una contraprestación a cambio. Tras explicar que el productor recibió por litro en septiembre, con costos que superan los .20 y altos precios en góndola, sostuvo: “vemos que los Estados (nacional, provincial y municipal) se llevan más del 40 % de esa torta en el cobro de impuestos y servicios, y el Estado (que en estos últimos años no ha hecho nada por el productor), se lleva mucho sin poner nada a cambio”. En cambio, “el productor, que es el que pone el capital, que está todos los días trabajando en el campo está haciéndolo a pérdida”.

El dirigente santafesino afirmó que no hay política lechera “desde hace rato”, dejando todo librado al mercado. “Y las consecuencias están a la vista: estancamiento y cada vez menos vacas y menos productores”.

Mientras tanto, reiteró una de las consignas que orientan las protestas en los últimos tiempos: “la plata está en la cadena”. Como argumento reiteró los valores que se cobran al consumidor. “El Estado debe arbitrar para que ese dinero se reparta de manera más equitativa en esa cadena”. En tal sentido argumento que es información oficial del OCLA (Observatorio de la Cadena Láctea Argentina), la que también afirma que desde diciembre de 2015 hasta agosto de 2018 entre producción e industria se perdieron 23 mil millones de pesos. “De esos, 22 mil millones lo perdieron los productores. El Estado tiene que arbitrar para que esto no ocurra y es un mero observador”, concluyó.

Fuente Campo Litoral