Anoche en el estadio cubierto del Club Atlético Pilar se presentó unos de los emblemas del rock nacional. Miguel Mateos sigue con su gira presentando «Primera fila» ante un lleno total cercano a las mil almas , de las mas diversas edades, que observaron un show de acuerdo a las expectativas que un artista de su talla .
A las 22 hs en punto comenzó el set de canciones que hicieron delirar a los presentes » Sólo una noche mas» fue la encargada de abrir el fuego que no se apagó durante todo el concierto, prosiguió con » Llámame, Perdiendo el control, Cuando despierte mañana , Solos en América, Malherido, Si tuviéramos alas» ; uno de los momentos más importantes en interacción con la gente; siguió con » Bar Imperio, Beso francés, Lola, Atado a un sentimiento, Rock libre» y llegó el momento donde recordó parte de su placa con Zas » Rockas vivas » con el set » Un poco de satisfacción, Extra-extra, Un gato en la ciudad y con Huevos parecía que se venía el estadio abajo.
Llegó la hora de los bises con » Es tan fácil romper un corazón , No me dejes caer; enganchando con » Help » de The Beatles para arribar al momento que uno no desea que es el final; luego de más de dos horas a pura adrenalina y disfrute ; pero antes nos regaló » Obsesión».
Mateos pasó por Pilar y por supuesto dejó su huella con una banda prolija y efectiva con dos violas bien rockeras y potentes con Roly Ureta y el rosarino Ariel Pozzo, en bajo Alan Dholan, teclados Nano Novello y la compañía de siempre en batería Alejandro Mateos.
En su momento Miguel recordó a Gustavo Cerati, es decir emocionante por donde se lo mire. Ah, no escuchamos » Tirá para arriba » pero lo perdonamos. Nos retiramos satisfechos de rock nacional al palo.