Marcelo Aimaro, presidente de MeProLSaFe, advirtió que “el Estado recauda más con el IVA de la leche que lo que percibimos los productores, el productor no es responsable de lo que valen las cosas en las góndolas”, en tanto pidió a funcionarios “basta de hablar y de fotos” y comenzar a trabajar en la asistencia financiera al sector.
El pasado jueves, la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe se reunió con el subsecretario de Lechería de la Nación, Arturo Videla, en Rafaela. El presidente de MeProLSaFe, Marcelo Aimaro, comentó los planteos realizados: “Le volvimos a transmitir lo mismo que le decimos hace mucho tiempo a él y a Buryaile (ministro de Agroindustria) y le presentamos un pedido de asistencia financiera. Los créditos que existen no les sirven a los productores, no los pueden tomar”.
“La respuesta fue que ellos tienen voluntad, pero nosotros necesitamos respuestas rápidamente. La plata está dentro de la cadena, pero hay que ordenarla”, continuó Aimaro.
En cuanto a la ayuda solicitada, el representante de la entidad que nuclea a los lecheros de la provincia aclaró: “No queremos ningún tipo de subsidios ni compensaciones. La plata está, pero hay alguien dentro de la cadena que se la está llevando”.
“Basta de hablar y de fotos, si seguimos con esta libertad total de mercado los productores vamos a seguir desapareciendo. Los funcionarios, no solo los de ahora, los de antes también, parecen sordos y ciegos”, dijo, sobre las políticas aplicadas para con el sector.
Acerca de los precios y la cantidad percibida por los lecheros, Aimero describió: “El Estado recauda más con el IVA de la leche que lo que percibimos los productores. El productor no es responsable de lo que valen las cosas en las góndolas”.
“El costo de la producción del litro de leche es de $5,30. Nos pagan $3,50. Si no lo corregimos, van a desaparecer productores. No debería costar más de $12 para la venta, no $17 o $18”, prosiguió.
A esta falta de rentabilidad, se le sumo el fenómeno climático. “Eso hizo que algunos productores dejen la actividad”, afirmó Aimaro, quien también aseguró que este modelo de producción “favorece a la comercialización. El litro de leche, para nosotros, aumentó cincuenta o setenta centavos, pero en la góndola subió cuatro pesos”.
En última instancia, Aimaro afirmó no saber a ciencia cierta la cantidad de tambos cerrados, “pero son muchos”. “Y lo más preocupante es la cantidad de vacas que se han ido del sistema. Ante la urgencia de dinero, el productor las manda al frigorífico. Esto se va a sufrir en un par de años”, concluyó.
Fuente SRLC