El día 3 de febrero de 2020 el Poder Ejecutivo procedió al registro como Ley Nº 13.957, promulgó y publicó en el Boletín Oficial la iniciativa del Senador Rubén Pirola, surgida del trabajo conjunto entre el equipo del legislador y el presidente del Concejo Municipal de Esperanza y Senador Suplente Dr. Víctor Elena.

Vale recordar que la ley impulsada por el representante de Las Colonias, reconoce en todo el territorio de la Provincia de Santa Fe, el derecho de todo niño recién nacido a que se le estudie tempranamente su capacidad auditiva y se le brinde tratamiento en forma adecuada y oportuna si lo necesitare. Se crea en el ámbito del Ministerio de Salud de la Provincia, que será la autoridad de aplicación de la presente Ley, el Programa Provincial de Detección Temprana y Atención de la Hipoacusia con los objetivos fijados por el artículo 4º de la Ley Nacional Nº 25.415.

El Ministerio de Salud de la Provincia de Santa Fe coordinará los contenidos, mecanismos operativos e implementación del Programa con las autoridades nacionales designadas al efecto. Las obras sociales y asociaciones de obras sociales regidas por leyes provinciales, incluido el Instituto Autárquico Provincial de Obra Social (IAPOS), y las entidades de medicina prepaga, que desarrollen sus actividades en la Provincia, deberán brindar obligatoriamente a sus afiliados las prestaciones establecidas en esta Ley.

Los gastos que demande el cumplimiento del Programa Provincial de Detección Temprana y Atención de la Hipoacusia creado por la presente Ley, que consta de 7 artículos cuidadosamente elaborados, se financiarán con los créditos correspondientes a la partida presupuestaria del Ministerio de Salud, con excepción de los que se encuentran a cargo de las entidades enunciadas más arriba.

Se calcula que uno (1) de cada 1.000 niños nace con sordera bilateral profunda y cinco (5) de cada 1.000 niños con otras formas de sordera. La hipoacusia (sordera) durante los primeros años de vida puede dificultar no sólo la adquisición del lenguaje, sino también el desarrollo psicológico e intelectual del niño, con las repercusiones posteriores en su desarrollo general. La edad del diagnóstico es importante. Trabajos científicos sugieren que, si el tratamiento comienza antes de los 6 meses, el desarrollo del lenguaje y el habla es mejor que cuando se inicia después del primer año de vida.

La implementación del Programa permitirá la “detección precoz de niños sordos y la aplicación tratamientos adecuados y oportunos”; fundamentó el senador justicialista Rubén Regis Pirola.