Cristina Fernández de Kirchner puso en marcha la central de energía nuclear Atucha II, que sumará al sistema energético nacional 700 megavatios, y ratificó la meta de concretar el alargamiento de vida de la central de Embalse Río III, y la construcción de Atucha III y del reactor nuclear Carem.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner agregó que este plan nuclear ubica al país entre los líderes mundiales, tanto en producción y como en el “uso pacífico” de esa energía.
La Primera Mandataria encabezó esta tarde la inauguración de Atucha II, en la localidad bonaerense de Lima, partido de Zárate, durante un acto transmitido por la cadena nacional de radiodifusión, en el cual destacó que el abandono de esa obra, ocurrido en el 1994, la convirtió en “símbolo de la postergación de lo que éramos pioneros”.
“Me siento parte de esa generación que está pagando las deudas histórica, económica, social, financiera”, señaló, para asegurar que “hemos recuperado la voluntad de decisión de que el país debe gobernarse a sí mismo”.
Cristina Kirchner pulsó los dos botones que pusieron en funcionamiento la turbina y el ingreso de agua para el enfriamiento de Atucha II, luego de haber recorrido la obra, acompañada el gobernador bonaerense, Daniel Scioli; por los ministros de Planificación, Julio De Vido, y de Defensa, Arturo Puricelli, además del secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; el secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini; el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, y el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán.
Destacó en su discurso que cuando se puso en marcha Atucha I, en el año 1974, la Argentina se convirtió en “el primer país latinoamericano en operar una central nuclear”, pero tras el inicio de Atucha II, la obra fue paralizada en el 1974, por cuanto “las injerencias externas y las equivocaciones políticas” internas apuntaban a que “la Argentina no tuviera desarrollo nuclear”.
Indicó que la recuperación del Plan Nuclear Argentino en el 2006 fue “uno de los bastiones más importantes del desarrollo tecnológico argentino”.
Subrayó que con la puesta en marcha de Atucha II, “vamos a inyectar al sistema 700 megavatios, porque 45 están reservados para el funcionamiento de la misma central, y además estamos aumentando la participación de la generación por energía nuclear del 7 al 10 por ciento, diversificando nuestra matriz energética”.
“Por si esto fuera poco –agregó- hemos incorporado en estos ocho años 7.422 megavatios y estamos llegando a los 8.122 megavatios más desde el 2003 a la fecha, un 45,4 % más de lo que teníamos cuando Néstor Kirchner asumió la Presidencia”.
Puntualizó que esa energía fue necesaria por el aumento de la demanda debido a que “los argentinos hemos protagonizado en estos ocho años el crecimiento más importante de la historia, y en el último año, en el 2010, y en lo que va del 2011, tenemos el orgullo de ser el segundo país después de China que más ha crecido en su economía en todo el mundo”.
Sin embargo, afirmó que “tenemos que ir por más”, por lo cual detalló que “las próximas metas tienen que ser la puesta en marcha del alargamiento de vida de Embalse Río III, la segunda construcción; la de Atucha III, y la construcción del reactor nuclear CAREM, que ha comenzado”, que serán “pequeños reactores de 25 megavatios que permitirán dar energía a pequeñas localidades del interior, y que el primero será instalado en Formosa”.
Destacó que los reactores también “pueden ser aprovechados para toda la industria de la defensa, y nos convierte en un país líder en energía nuclear y líder en el uso pacífico de la energía nuclear y de la no proliferación” y apuntó: “No todos pueden decir lo mismo”.
“Los científicos argentinos –subrayó- nunca han usado sus neuronas para destruir la vida de otros seres en otros lugares del planeta, al contrario, siempre las hemos empleado con fines pacíficos” porque “somos gente de paz”.
Concluyó sosteniendo que “esta maquinaria argentina cuenta con el mejor combustible, que es el pueblo argentino y su fuerza” y por ello exhortó a “ponernos de pie para seguir asegurando que esta maquinaria nunca más nadie la pueda detener y siga su marcha”.

Fuente Sala de Prensa – Presidencia de la Nación